Elope – Visceral – Panfleto y Contestación

foto por Evelyn Tede

El pasado domingo en el Lugar Fuera del Tiempo tuve el inmenso agrado de adquirir las tres publicaciones que se presentaban ese día. Dicho agrado se agigantó al día siguiente, cuando decidí devorarme los libros, que me parecieron excelentes.
El primero que leí fue “Panfleto y Contestación”, de Marcos Mizzi, trabajo que puede catalogarse como una bofetada poética o bien un libro ardiente, que, les aseguro, los dejará boquiabiertos.
El libro de Julieta Acosta, “Elope”, me fascinó. La autora se anima a jugar con las palabras, con los significados y los significantes, los invierte y los vuelve a poner en su lugar, renovados. Enrosca y desenrosca poemas, a veces en verso a veces en prosa, de una manera tan musical y armoniosa que no creo que pueda decirse jamás que es un libro del montón. Se atreve a viajar introspectivamente y desnudarse con palabras, y es que para qué se es poeta si no es para desnudarse (ya lo dice el dicho: un poeta con ropa, más que poeta es un amigo). Los versos son hondos, vaya si lo son: “yo no sé si me quedo conmigo” nos dice en un momento, y luego viene la melodía, los vicios, las mañas, la sensibilidad, las ganas que la invaden, la vida que es una eterna despedida, la música que baila, el cielo y el descanso bien merecido. Si Julieta, quedate con vos.
En “Visceral” el trabajo se vuelve quizás más complejo. El laburo fue hecho en grupo por los señores/as Federico Milicich, Julieta Acosta, Marcos Mizzi y María Ludwig, y es un recorrido carnal y crudo por el interior/exterior de los cuatro autores. Si fuese un disco, sería un álbum conceptual de King Crimson, tomando esto en referencia a la estructura central del libro. Son cuatro almas distintas (muy distintas) pero con tanto en común que al leerlos comprendemos perfectamente por qué ellos y no otros cuatro.
Y lo que más contento me pone es ver sus firmas en la primer página, poder apreciar el trazo de los cuatro, intentando sacar conclusiones respecto del tipo de persona que son sólo con ver cómo dibujan cada letra, tratar de adivinar cuán sensibles son, cuánta alma les entra y cuánta les sale.
Felicitaciones, creo que más ni menos se debe decir.



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