24 mayo 2010

Esta mañana llovió de a ratos.
Sobre la primavera que crecía las raíces dibujaron mil preguntas.
Mi mirada en el espejo me descubrió siendo aroma de uva, manojos de ternura,
y miles de palabras escupidas diurnamente
sobre el aire que las nombra y acomoda.

He descubierto en las flores las cachetadas del viento de orillas,
pero sólo fue a través de los árboles que llegué a tu cuerpo desatado del río.

Vos, y tu sombra repitiéndose en la oscuridad.
Sobre la altura exacta deshojaste las golondrinas y en cada canto lloviznaron las semillas
(pequeña ambición vegetal).

Arqueando las pestañas en los reflejos
aprendí cuando no hay voz en mi paliducho corazón.
En la mirilla de las puertas la luz me sonríe
Y empuja los ríos que serán el mañana:
Todo regresó flotando en el agua profunda.



http://los-mil-lunares-de-clarisa.blogspot.com/

No hay comentarios.: