19 junio 2011

 








































4 comentarios:

Nicolás dijo...

Después de un viaje por Reguleslandia es necesario relamer las incopelusas.
Esto es una genialidad, así como la idea del automatismo.
Algunos llegamos a dudar de tu existencia física, lo cual le da a las historietas una cuota más fantasmagórica.

Raúl. dijo...

Muy entretenido. Está bueno, a mi gusto. Saludos.

Adrián Regules dijo...

Nicolás: ¡no sea exagerado, hombre! Genialidades son el invento de la imprenta, la interné y la Cepita manzana. Ahora, con eso del automatismo he incursionado en cada cosa que prefiero ocultar, porque es sorprendente el grado de boludez que puede alcanzar una persona.
Por lo demás, le aseguro que tengo existencia material, que respiro, como y a veces, sólo a veces, duermo.

PD: me gusta eso de la fantasmagoría. Me gustan las atmósferas de esa clase.

Raúl: por un momento pensé que usted era Kokambar (un historietista muy loco que anda por ahí), por aquello de “muy entretenido”. Es una frase que le he visto utilizar en varias oportunidades. Buenísimo que le haya gustado.

Abrazos para ambos sendos dos.

Lena Malena dijo...

Creo que pasarán los meses y luego los años, y será necesario que algún vil catedrática institucionalice los nuevos conceptos poéticos que el Oh! gran Regules, introduce y desarrolla en cada una de sus obras.
La zarpa, man, la zarpa. (Y me refiero a garras)